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Con motivo de mi reciente viaje peregrinación a Tierra Santa, he tenido la oportunidad de elaborar este reportaje sobre las zonas de Nazaret, Jericó, y el desierto de Judá donde existen importantes yacimientos de silex .El sílex (SiO2) es un mineral de gran dureza (7 en la escala de Mohs), se usó en laEdad de Piedra para la elaboración de herramientas cortantes por su capacidad de romperse en lascas (fractura concoidea, láminas rectas con ligeras curvas). Se rompía en puntas cortantes. También fue usado para encender fuego por su capacidad de crear chispas al chocarse con otra pieza de igual o mayor dureza. Generalmente se halla asociado con la caliza, rocas sedimentarias formadas por carbonato de calcio, depositadas en aguas profundas. Típicamente se presenta en forma de nódulos entre estratos de caliza.
El primer destino de nuestro viaje es Nazaret, en cuya entrada se pueden ver las gigantescas canteras de Tur,am. Según me indica el guía, las canteras surten de piedra caliza a toda la zona, piedra que se utiliza habitualmente en la construcción y en la elaboración de material para el asfaltado de calles. Muy cerca de Nazaret, a apenas 20 minutos se encuentra la localidad de tabga, donde se enclava el primer lugar de interés geológico, el Lago de tiberiades o Mar de Galilea, una laguna de agua dulce nutrida por el río Jordán formada en el interior de un crater volcánico. La laguna se encuentra a 200 metros bajo el nivel del Mar, y alcanza un máximo de profundidad de 200 metros en el centro. Alrededor del lago, en las orillas se pueden apreciar grandes bloques de Andesita, y comienzan a aparecer las primeras lascas de silex y ópalo. Desde el lago Tiberiades nos dirigimos al Mar Muerto, bordeando la frontera con Jordania. El paisaje cambia radicalmente y en pocas horas el desierto sustituye al suave clima mediterraneo que veniamos disfrutando. El Mar Muerto es un lago de agua salada situado en la localidad de Ain-Feshka, con una densidad increible, y una profundidad de 400 metros en su cabecera. aquí comienza la gran falla de los lagos, una fractura de 4.830 kilometros en dirección Norte Sur desde Africa hasta el Jordan. A escasos kilometros del Mar Muerto se encuentran las ruinas de Jericó de Tel-el-Sultan, una de las ciudades mas antiguas excavadas, donde ya empiezan a aparecer interesantes muestras de silex muy fino y brillante, como pulido. De allí partimos hacia el desierto de Judá, en el cual se aprecian perfectamente los yacimientos de silex en cada una de las fracturas de la piedra. La imagen del desierto es verdaderamente impresionante y el calor asfixiante, pero merece la pena detenerse a coger unas muestras, mas desgastadas que las obtenidas en Jericó.
En fin, solo me restan desde aquí los agradecimientos; por una parte a la Comunidad Siloe, de Murcia, dirigida por Don Serafín Gomez, por su amable invitación a acompañarles a Israel, y al guía, Rafael Pascual, de Guadalajara, el cual me ha suministrado gran información sin la cual esta crónica hubiera sido imposible"
José Miguel Martinez Nadal
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